Posición Común del Sistema de la ONU sobre Política de Drogas
¿Qué es?
En Noviembre de 2018, la Junta Ejecutiva de Coordinación del Sistema de las Naciones Unidas — que reúne a las máximas autoridades de todas las agencias de la ONU— adoptó la posición común del sistema de la ONU sobre cuestiones relacionadas con las drogas. Este acuerdo compromete a todo el sistema de la ONU a apoyar políticas de drogas equilibradas, basadas en evidencia y en derechos humanos, orientadas al desarrollo y alineadas con la Agenda 2030. También creó un Grupo de Trabajo Interagencial (dirigido por la UNODC junto con múltiples agencias) para coordinar su implementación.
Elementos centrales
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Ocho principios compartidos (salud, derechos humanos, desarrollo, igualdad de género, no dejar a nadie atrás, etc.) que respaldan explícitamente la reducción de daños y las alternativas a la sanción penal; el texto de la CEB menciona la despenalización de la posesión para uso personal “en los casos apropiados.”
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Un Grupo de Trabajo Interagencial para llevar estos compromisos a la práctica en los equipos de país de la ONU y en la sede.
¿Cómo llegamos aquí?
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2016: La Sesión Especial de la Asamblea General (UNGASS) sobre el problema mundial de las drogas pidió una mayor coordinación interagencial en la ONU.
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2018: La CEB adopta la Posición Común y establece el Grupo de Tareas para “hablar con una sola voz.”
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2019–hoy: La Comisión de Estupefacientes (CND) y distintas agencias de la ONU discuten regularmente la coordinación interagencial. Aunque muchos Estados y agencias hacen referencia a la Posición Común, las menciones explícitas en las resoluciones de la CND suelen ser disputadas, por lo que se utiliza un lenguaje más general sobre “colaboración interagencial efectiva.”
El panorama de resoluciones
La posición común del sistema de Naciones Unidas sobre drogas fue adoptada durante UNGASS 2016, en Nueva York:
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Las resoluciones recientes de Naciones Unidas sobre el problema mundial de las drogas llaman a respuestas integrales, con atención a los derechos humanos, e instan a la UNODC a promover iniciativas conjuntas, en línea con la Posición Común.
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La CND analiza de forma rutinaria la coordinación interagencial y solicita informes periódicos de la UNODC sobre este trabajo, lo cual está alineado (aunque no siempre lo nombra) con la Posición Común.
Recursos oficiales de la ONU
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Página de la CEB: visión general y PDF descargable de la Posición Común.
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Portal de UNODC: sitio dedicado a la Posición Común, con los principios, el Grupo de Tareas y materiales.
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PDF oficial (CEB/2018/2): texto completo con compromisos operativos (reducción de daños, alternativas a la condena, salud en prisiones, enfoques de desarrollo).
Publicación clave elaborada por el Grupo de Trabajo
“Lo que hemos aprendido en los últimos diez años: Resumen de conocimientos adquiridos y producidos por el sistema de la ONU sobre cuestiones relacionadas con las drogas” (2019).
Fue preparado por el Grupo de Tareas Interagencial para consolidar la evidencia y las orientaciones del sistema de la ONU dirigidas a los Estados Miembros y equipos de país.
Nota relacionada: en su informe a la Asamblea General de 2024, la UNODC destacó la promoción activa y la difusión de la Posición Común en todo el sistema, incluyendo a los Coordinadores Residentes.
¿Qué está pendiente para la operacionalización real?
A pesar de contar con una base política sólida, la implementación sigue siendo desigual. Para pasar de los principios a la práctica, Ágora aboga por:
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Integración a nivel de país
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Que los equipos de Naciones Unidas a nivel nacional incorporen de forma sistemática los compromisos de la Posición Común (reducción de daños; alternativas a la sanción penal; despenalización del consumo en los casos apropiados; salud y derechos en prisiones) en los Marcos de Cooperación para el Desarrollo Sostenible y planes de trabajo conjuntos, con presupuestos e indicadores claros.
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Planes de trabajo y métricas transparentes del Grupo de Trabajo
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Publicar un informe anual público de implementación: qué países han adoptado qué medidas, financiamiento movilizado y resultados (incidencia de VIH/VHC, muertes por sobredosis, hacinamiento carcelario, acceso a servicios).
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Fortalecer a los Coordinadores Residentes (CR)
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Elaborar diagnósticos país sobre política de drogas y sus vínculos con el desarrollo/los derechos, y contar con equipos de apoyo rápido para ayudar a los gobiernos a diseñar programas de reducción de daños y alternativas a la prisión.
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Alinear Viena–Ginebra–Nueva York
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Promover que las resoluciones de la CND y de la AGNU hagan referencia explícita a la Posición Común (o al menos a sus principios y productos), y que se soliciten informes públicos regulares, superando el actual lenguaje fragmentado.
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Agendas vinculadas: prisiones y justicia
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Conectar la Posición Común sobre drogas con la Posición Común de la ONU sobre el encarcelamiento (2024), para reducir el encarcelamiento excesivo y mejorar la salud y los derechos en detención, ámbitos directamente afectados por leyes de drogas punitivas.
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Guías normativas y paquetes técnicos
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Consolidar opciones legales y de política modelo (ej. marcos de despenalización; paquetes mínimos de reducción de daños; proporcionalidad en las sentencias) en una caja de herramientas avalada por la ONU para ministerios, con costos estimados y estudios de caso.
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Llamado a la acción
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Colaboramos con equipos de país de la ONU, ministerios de salud/justicia y sociedad civil para territorializar la Posición Común en estrategias nacionales y Marcos de Cooperación.
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Monitoreamos avances a través de tableros independientes y publicamos estudios de caso de implementación.
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Incidimos en Viena, Ginebra y Nueva York para que las resoluciones y orientaciones den nombre y operatividad a la Posición Común, de modo que la salud, los derechos humanos y el desarrollo no sean añadidos opcionales sino práctica estándar.
📣 Fortaleciendo la Respuesta Unificada: Abogando por el Grupo de Trabajo Interagencial
La Posición Común del Sistema de la ONU sobre Política de Drogas (2018) es un avance político monumental, pero su éxito depende de la coordinación. Por eso, en Ágora abogamos por un Grupo de Trabajo Interagencial (GTI) con recursos suficientes y permanente. Este GTI garantizaría que los principios de salud, derechos humanos y desarrollo de la Posición Común no se queden en documentos de sede, sino que se traduzcan en acción real a nivel de país.
La historia del sistema de la ONU ya muestra que la colaboración interinstitucional es la única vía para abordar las complejas consecuencias de la política de drogas.
🏛️ El Precedente Histórico: Unidades de Coordinación Existentes
La iniciativa de crear un Grupo de Trabajo Interagencial (GTI) bajo la Posición Común sigue el modelo de estructuras previas de coordinación que han demostrado la capacidad del sistema para "hablar con una sola voz" cuando se alinea en torno a objetivos claros.
El Grupo de Tareas del Sistema de la ONU sobre Crimen Organizado Transnacional y Narcotráfico (2011–2016)
Este grupo es un ejemplo clave de cómo las agencias de la ONU se unen para influir en las políticas de drogas desde una perspectiva más amplia que la penal.
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Establecimiento: Creado en 2011 y compuesto por 14 entidades de la ONU, fue una respuesta a la creciente necesidad de abordar las drogas dentro del marco de la seguridad, el desarrollo y los derechos humanos.
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Mandato Clave: Desarrollar una estrategia para proporcionar información coordinada a los procesos de los Estados Miembros, incluida la Sesión Especial de la Asamblea General (UNGASS) de 2016.
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Logro Central (2014): Produjo los Puntos de Conversación sobre Política Internacional de Drogas y UNGASS 2016, un documento de coordinación interna que promovió una reorientación de la política global para:
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Aumentar el enfoque en salud pública, prevención, tratamiento y atención.
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Considerar alternativas a la penalización del uso de drogas y el encarcelamiento.
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Asegurar que las personas más vulnerables se beneficien de oportunidades de desarrollo y medios de vida alternativos.
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📣 Requerimientos para el GTI Permanente
El éxito de la Posición Común de 2018 requiere un mecanismo de coordinación que no sea ad-hoc, sino permanente, transparente y con financiación asegurada.
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1. Garantía de Permanencia y Financiación: Presionamos para que el GTI tenga un presupuesto central y dedicado. Sin financiación no asignada, la coordinación se desvanece y la implementación de la Posición Común en los países se vuelve intermitente.
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2. Informes Públicos y Transparencia: Abogamos para que el GTI publique un informe anual de implementación, detallando qué Equipos de País están adoptando la Posición Común y, crucialmente, midiendo el impacto en resultados de salud y derechos (ej. acceso a naloxona, reducción de encarcelamiento).
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3. Coordinación de la Evidencia: Exigimos que el GTI asegure que la evidencia de agencias de desarrollo y salud (como la OMS en la revisión de la hoja de coca) se integre sistemáticamente en las discusiones de la CND, rompiendo los "silos" de Viena.
El trabajo de coordinación del GTI es la única manera de asegurar que los compromisos de alto nivel de la CEB realmente lleguen a las personas en el terreno.
Puede obtener más información sobre la iniciativa interinstitucional para adoptar un enfoque centrado en la salud en las políticas de drogas en este vídeo sobre el Diálogo Interministerial de la Asamblea Mundial de la Salud.
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